Una sesión de reflexología podal puede variar en función de la persona que lo recibe, pero por lo general dura entorno a una hora.

Comenzamos con una pequeña entrevista sobre la historia clínica del cliente , qué enfermedades le han sido diagnosticadas previamente y los medicamentos , homeopatía o suplementos nutricionales que esté tomando, ya que pueden afectar a la forma en que se lleve a cabo la sesión. Existen una serie de contraindicaciones al tratamiento que será preciso conocer  , como son embarazadas antes del tercer mes, casos de fleblotrombosis, trombosis, flebitis, o tromboflebitis o cualquier otra enfermedad de la que la persona no tenga un diagnóstico preciso de su médico.

La sesión se lleva a cabo mientras el cliente está sentando en una hamaca especial de reflexología.  El terapeuta relajará los pies a través de la flexión y otros movimientos similares ( desbloqueos y movilizaciones )  Para después comenzar con el tratamiento más específico en función del trastorno y motivo de la consulta . La sesión suele ser muy relajante y en ocasiones las personas tratadas llegan a dormirse.

El número de sesiones variará en función de cada cliente y la frecuencia suele ser semanal.

Aunque a mi me encanta recalcar el caracter preventivo que tiene la Reflexología, nos ayuda a despertar a nuestro médico interno, promoviendo la homeostasis ( el equilibrio perfecto). Por lo que en este caso , recibir una sesión quincenal o mensual puede ser fantástico para mantenernos saludables.

Si la persona así lo desea,  se podrá añadir al  tratamiento la Terapia Floral (Flores de Bach testadas con Kinesiología), complemento ideal para trabajar a nivel profundo nuestro equilibrio cuerpo-mente.

  • Esta técnica está indicada como complemento a cualquier tratamiento médico.
    Los servicios no pretenden sustituir el asesoramiento, el diagnóstico o el tratamiento médico. Busque siempre el asesoramiento de su médico o de otro proveedor de atención médica calificado cuando tenga dudas sobre alguna afección médica.